Alivio para los hipotecados: el Euríbor registra su mayor caída interanual en más de una década

El reciente descenso del Euríbor a doce meses, el índice al que están referenciadas la mayoría de las hipotecas en España, está proporcionando un respiro significativo para los consumidores este agosto. Tras un período de incrementos constantes, el Euríbor está en camino de cerrar el mes con su mayor caída interanual desde marzo de 2013, una noticia que será bienvenida por quienes tienen hipotecas a tipo variable, que se beneficiarán de una reducción considerable en sus cuotas.

El Banco Central Europeo (BCE) ha jugado un papel crucial en esta evolución. Después de un ciclo de subidas de tipos que comenzó en julio de 2022, el Euríbor alcanzó un pico del 4,073% en agosto de 2023, poniendo una presión considerable sobre los presupuestos familiares. Sin embargo, con la expectativa de bajadas en los tipos de interés por parte del BCE, el Euríbor ha iniciado una trayectoria descendente, situándose en una media del 3,221% hasta el 13 de agosto de 2024. Este descenso, de 0,852 puntos porcentuales en comparación con el mismo período del año anterior, se traduce en un alivio económico significativo para los hogares.

Esta rebaja no solo afecta a los préstamos ya existentes, sino que también se refleja en las nuevas hipotecas, con los bancos ajustando sus ofertas comerciales en respuesta a un Euríbor en tendencia descendente.

La evolución futura del Euríbor sigue siendo incierta y dependerá en gran medida de las próximas decisiones del BCE. Aunque los analistas esperan que el índice continúe bajando en los próximos meses, todo dependerá de si el BCE confirma las expectativas de nuevas reducciones en los tipos de interés. Por ahora, lo único que parece seguro es que el supervisor europeo podría acometer una nueva bajada en su reunión de septiembre, una acción que ya se ha empezado a descontar en el mercado.

Este cambio de rumbo supone un alivio para los consumidores, especialmente aquellos con hipotecas variables, quienes verán una reducción en sus pagos mensuales, ayudando a mitigar el impacto económico de un período prolongado de tipos de interés elevados.